Querido Lector,
Los descubrimientos en campos tan aparentemente distintos como la física cuántica, la religión comparativa y los estudios de experiencias humanas anómalas están revelando que el mundo interno de la psique y el universo externo están profundamente interconectados. A pesar de que históricamente se ha considerado un principio axiomático por los venerados pensadores Orientales, sin duda alguna está quedando claro que esta relación es una realidad válida en los asuntos occidentales, y que está emergiendo una nueva ciencia de la conciencia.
Ahora existen herramientas avanzadas para la exploración de la naturaleza del ser humano y nuestra interconexión con otros campos más allá de la percepción normal de la realidad. Desde los análisis electrónicos hasta las formas sofisticadas de biorretroalimentación, estamos aprendiendo cómo expandirnos sobre los descubrimientos básicos de la neurociencia y de los campos bioenergéticos, utilizando una nueva medicina y una nueva física que hacen uso de una estructura complicada de campos energéticos, de cuya existencia apenas sospechan los científicos. Además, estas herramientas se expanden sobre los descubrimientos en el desarrollo humano, trayendo a la práctica lo que una vez se consideró únicamente una ‘seudo ciencia’ y trayendo lo ‘transpersonal’ hacia un estudio medible donde se unifica todo el campo de la mente y del espíritu.
Estos estudios demuestran que el individuo no está separado de la totalidad. Conforme los científicos investigan el cerebro al igual que la totalidad del cuerpo, cobra aún más importancia lo imperativo del equilibrio de las energías del cuerpo y de los biocampos alrededor del mismo. Para ilustrar este punto: un jardín de vida no crece simplemente a partir de una semilla, bulbo, rizoma o esquejes, sino de la experiencia, el entorno y las condiciones naturales. La división individual-colectiva de la psique implícita en términos como “mente-cuerpo” se está viendo como demasiado elemental y dualista, que no refleja la conciencia más profunda de la integración de nuestros biocampos en el universo en expansión y en evolución. Los biocampos de nuestro cuerpo pueden ser parte del ‘Grial’ en los emergentes campos neomédicos, en donde el mundo de la psique humana se está viendo ahora como una realidad vasta e interconectada que opera por medio de las líneas axiatonales extendidas de la vida.
El estudio continuo de los muchos campos del cuerpo nos enseña a entender la regulación del metabolismo y de nuestra naturaleza interna. Cierto es que nuestro cuerpo tiene su propia arquitectura interna específica, pero también está conectado a una red mayor de campos de conciencia internos y externos que nos ayudan a llegar a una conciencia de la Vida mayor. Al acercarnos a la comprensión holística de que somos más que simplemente un cuerpo, descubrimos que somos una red de luz dentro de una red de luz. Y al expandirse la red, descubrimos el verdadero significado de la llegada de los ángeles y de la hueste celestial asociada con la ‘Casa de Muchas Moradas’.
— J.J. Hurtak, Ph.D., Ph.D.
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